Qué funciona y qué no para motivar a los estudiantes on-line.

La clave de la motivación de los estudiantes tiene que ver con la capacidad interna de atención y los intereses individuales. Ya sean educadores, emprendedores u oradores motivacionales, debemos preguntarnos: ¿Cómo puedo ayudar a cada uno de mis estudiantes a sentirse más conectados consigo mismos como aprendices, así como a involucrarse más personalmente en el mundo en el que viven? Muchos de los factores que son válidos en los formatos educativos tradicionales también se aplican a los formatos de aprendizaje en línea. Por ejemplo, es necesaria una baja proporción de estudiantes por maestro para que haya éxito en los estudiantes, independientemente del formato, ya sea en persona o en línea. Sin embargo, existen algunas técnicas específicas que los instructores en línea pueden adoptar para maximizar la motivación, el aprendizaje y la posterior retención de los estudiantes adultos. Para motivar a los estudiantes en línea, brinde oportunidades para que se conecten personalmente con la materia; haga que los estudiantes establezcan sus propias metas como establecer un sistema de autocontrol y seguimiento del progreso así como animar a los estudiantes a colaborar con el programa de estudios o en el material de lectura del curso.

 

Motivar a los estudiantes adultos

Los estudiantes adultos se motivan más para aprender, ya sea en línea o en persona, cuando son tratados como individuos únicos con metas, intereses y vidas propias. Una vez que se den cuenta de que estás de su lado, en el papel de entrenador, en vez del tirano, se sentirán más cómodos contribuyendo a las discusiones en clase y relacionando el tema con sus propias vidas. El objetivo final es fortalecer los niveles intrínsecos de motivación de los estudiantes adultos mientras se minimiza el enfoque en las fuentes extrínsecas de motivación, a fin de ayudar a garantizar que no dependan de usted para su aprendizaje.

 

Debido a que los estudiantes en línea a menudo son estudiantes adultos no tradicionales que han estado activos en la fuerza laboral durante al menos varios años, podría ser útil aplicar algunas estrategias de liderazgo y gestión comúnmente conocidas a su enfoque de enseñanza en línea: Resista la tentación de dominar y optar por la motivación; practique sus habilidades para escuchar; responsabilizar a los estudiantes; ser humano; ver las caídas en el desempeño de los estudiantes como oportunidades de enseñanza o aprendizaje; y comunicar a los estudiantes que son importantes.

 

Una de las formas más efectivas de ayudar a motivar a los estudiantes en línea consiste en conectar el “mundo real”, por así decirlo, con el tema en cuestión. Esto podría significar algo tan simple como comenzar cada día con una discusión en clase en línea que relacione algo relevante en las noticias con la lección actual. Alternativamente, puede optar por participar en role playing haciendo que los estudiantes apliquen conceptos de lectura actuales a carreras futuras o situaciones hipotéticas. Se ha demostrado que la interacción es una parte valiosa del proceso de aprendizaje, ya que el acto de participar en la dialéctica con otros refuerza los conceptos al ayudar a los estudiantes a solidificar y elaborar conceptos clave del tema o material de lectura. Cualquiera de estas aplicaciones podría llevarse a cabo en salas de chat en línea a través de la discusión de los estudiantes, asegurando así el compromiso tanto con el material de la asignatura como entre ellos.

 

Otra forma de ayudar a los estudiantes a sentirse más motivados es hacer que sigan su propio progreso y procesos de aprendizaje. Una técnica es el método del portafolio, en el que los estudiantes compilan todo su trabajo en un solo documento para permitirles seguir su propia progresión desde el primer trabajo hasta el último. Una compilación física sería especialmente útil para los estudiantes en línea, ya que es demasiado fácil sentir que toda la evidencia de aprendizaje y comprensión de la materia está siendo relegada al ámbito digital. Además, pida a los estudiantes que reflexionen sobre el proceso de aprendizaje, después de completar cada tarea. De esa manera, es más probable que se sientan en control de su propia educación y se volverán más conscientes de sus propias fortalezas y debilidades, a fin de sentirse más capaces de comprender dónde necesitan más orientación.

 

Instrucción y motivación de aprendizaje

En 1996, el extenso estudio Motivation and Instruction de Deborah J. Stipek se incluyó en el Handbook of Educational Psychology. Stipek sienta las bases para las prácticas en el aula que los maestros pueden utilizar para maximizar los niveles de motivación de los estudiantes. Algunas recomendaciones en sus criterios para el éxito, la evaluación y las recompensas incluyeron las siguientes: “Defina el éxito en términos de dominio y mejora personal en lugar de en términos de desempeño en relación con los demás”; y “Hacer que las recompensas dependan del esfuerzo, la mejora y el buen desempeño”. También recomienda brindar diversas oportunidades de exploración y experimentación, a fin de aumentar las posibilidades de que los estudiantes disfruten del proceso de aprendizaje.