En la medida que más realizo propuestas metodológicas, pedagógicas y de recursos de aprendizaje de cara a los clientes y sus necesidades, más me doy cuenta de la importancia de contar con la planificación estratégica de la capacitación y formación del personal dentro de las organizaciones
  
 En ese contexto, cobra cada vez más sentido el diseño e implementación de las Universidades Corporativas o Academias corporativas, las cuales no son más que instancias de capacitación o formación laboral ubicada dentro de la misma organización y que tiene como objetivo planificar, diseñar y sistematizar los planes de enseñanza con base en las necesidades de la empresa.
 
Imaginemos no tener que diseñar cursos o capacitaciones en tiempo récord, solo porque se detectó a última hora una brecha de conocimiento que pudo haberse diagnosticado con anticipación, trayendo como consecuencia improvisación, poca pertinencia de los contenidos, materiales y recursos de aprendizaje, y además, determinar de dónde se consigue el presupuesto, ya que nunca estuvo planificada esta inversión.
 

 La Universidad Corporativa tiene múltiples beneficios, entre los que destaco:

  1.  1.- Diseño, planificación y ejecución de las estrategias de aprendizaje más efectivas y orientarlas a programas altamente especializados. 
  2. Fortalecimiento de la cultura corporativa, al permitir a los colaboradores mejorar sus capacidades o incluso adquirir nuevas habilidades para desempeñarse mejor, aumentando la satisfacción, motivación, y, en consecuencia, la fidelización y retención del talento humano. Además, es un espacio ideal para transmitir los valores, la visión y la cultura de la empresa. 
  3.  Flexibilidad programática, ya que son planes ajustados a las organizaciones y su realidad, fomentando además la autorregulación de los participantes.
  4. Comunidad de aprendizaje, espacio dentro de la plataforma de aprendizaje LMS, donde los colaboradores podrán contactarse y generar momentos de coordinación, comunicación y retroalimentación sobre su ruta de aprendizaje.  
  5. Medición del rendimiento, como elemento resultante del desempeño de los colaboradores, ya que se podrá obtener lo siguiente: Evaluación de resultados: Medición del rendimiento de los empleados antes y después de la formación, a través de una evaluación diagnóstica y una evaluación final. Retroalimentación continua: Recopilación de comentarios y realización de ajustes para mejorar la efectividad de los programas y planes de capacitación. 
En resumen, la Universidad Corporativa es una herramienta estratégica que ayuda a las empresas a desarrollar y retener talento, alineando la formación con sus objetivos comerciales y fomentando un ambiente de aprendizaje continuo. 
 
Y ustedes, ¿qué opinan? ¿Han diseñado o implementado alguna universidad o academia en sus organizaciones?
 
Autora: Daniela Ortiz en Linkedin